My historia de HALLOWEEN¡¡ "Sonrisa de Calabaza¡¡¡"

Sonrisa de calabaza¡¡¡

Caminaba por la calle ya eran las 8:00 y el sol ya se había metido, parecía que no había nadie en la calle, estaba nerviosa y de vez en cuando me daban algunos escalofríos como cuando sientes que alguien te ve.

Miraba por todas partes pero no parecía a ver nadie y yo había salido última de la escuela porque me había tocado hacer el aseo como casi siempre, ya que nadie me quería por ser nueva, acababa de llegar ase una semana y a las personas en Riderles no les gustaba las personas nuevas, no sabia muy bien porque pero siempre que yo pasaba la gente serraba ventanas y entraban a sus casas pero después de una semana eso ya me parecía normal.

Solo había una cosa que no me odiaba en todo Riderles y era un pequeño gatito que yo nombre Calabaza  ya que era un gato de lo que las personas llaman “un gato de mala suerte” era el típico gato negro, y como tal un gato de Halloween, siempre lo encontraba  en la esquina de mi casa, sentado alado del poste de luz, esperando a que yo llegara.

Estaba tan ocupada en las cosas de la escuela que no me percate que hoy era Halloween asta ver alguna que otra casa con adornos escalofriantes; a mi me encanta todo lo que dida miedo, no era una persona normal y prefería estar sola que con estas personas y Calabaza era mejor compañero que una de esas niñas populares de la escuela.

Ya llegando a la esquina de mi casa encontré a Calabaza como de costumbre sentada alado del poste esperando mi llegada, corría hasta el pequeño gato negro y tomándolo en mis manos corrí a casa.

Entre y vi a mi madre corriendo de un lado al otro vistiendo a Kity y Leo; Kity mi hermana menor y la favorita de mi madre vestía un traje de princesa con un poco de bailarina de ballet y esas dos cosas zombieficadas y mi hermano estaba vestido de un jugador de futbol americano zombie y yo ya había elegido que mi traje seria de Cleopatra momia, corrí a mi cuarto y puse a Calabaza en mi cama y comencé a reglarme.

Ya había terminado y me veía como una hermosa momia, tome un bolso negro y metí adentro a Calabaza y Salí corriendo vi los arreglos que mi madre había puesto, eran algunas pocas calabazas con sus largas sonrisas, esqueletos y mas.

Caminaba por la calle viendo a todos aquellos niños y niñas pidiendo dulces en compañía de sus padre o de otros amigos y yo bueno yo solo tenia a calabaza, creo que es porque tengo un aspecto escalofriante, cabello largo y negro, piel blanca y unas ojeras debajo de los ojos, caminaba por la calle mientras veía a otros niños verme pasar y apuntarme y gritar que hay venia la niña del aro, al paso de los días ya no me importaba.

Caminaba por la calle viendo a niños comer sus caramelos y mi bolsa aun seguía vacía, cuando encontré a mi madre con Leo y Kity y los dos ya tenían sus bolsas llenas de dulces.

—Hija cariño, Alicia, tienes asta las 12:00 de la noche para estar en casa, bien allá te veo—eso dijo mi madre para después salir corriendo detrás de Kity y Leo.

Camine durante dos horas desde las 10:00 asta las 12:00 de la noche y solo tenia media bolsa llena con dulces, que al mi parecer me los dieron solo para que me fuera lo mas rápido posible, caminaba a casa cuando de repente Calabaza salto de la bolsa y corrió al bosque yo corría detrás de el pero se escabullo detrás de un árbol cuando pude llegar a el atreves de esa empinada colina de tierra encontré a Calabaza subido en una rama del árbol moviendo su cola de un lado al otro mientras me observaba atento, estaba por subirme al árbol para bajar a Calabaza cuando sonaron las 12:00 en el gran reloj, las campanadas resonaban en todo Riderles, caí del árbol por el susto a el fango húmedo y mire a Calabaza, que aun agitaba su cola, yo le sonreí y de repente esbozo una gran sonrisa enorme como la de una…

“Calabaza”

Comenzó a cambiar, sus pies pequeños se alargaron asta parecer los de un humano, tenia unas manos, su piel era muy blanca y tenia el cabello naranja y en si todo el olía a calabaza.

—   ¿Alicia quieres ir a pedir dulces? — exclamo calabaza con una sonrisa en su rostro una sonrisa larga y enroscada.

—Que te hace pensar que iré — le dije con la voz temblorosa.

—Bueno, sabes porque nadie te quiere aquí, tu vez lo que nadie ve… como YO, solo podías verme tu. — me dijo levantando una ceja.

— ¿Claro que no yo solo… soy Alicia y nada mas— dije algo exaltada.

—No tu no eres solo Alicia tu eres… LA PRINCESA CALABAZA—

Mire a mi lado y un cabello blanco revoloteaba de mi cabeza, mi pelo se había vuelto blanco, abrí los ojos como platos y di un pequeño grito ahogado.

—Vamos Alicia, vamos a el país de las calabazas—

Corrimos por el bosque, entramos por un gran árbol y estábamos radiados de calabazas, más bien PERSONAS CALBAZA

—Yo no pertenezco aquí, yo… yo no quiero estar aquí, tal vez nadie pueda comprenderme pero me encanta ver a los cuervos volar, a las lilas florecer y ver películas de miedo. —

Calabaza me miro, y una lágrima salió de que ojo resplandeciente como una calabaza con una vela, me miro muy triste, se agacho de el suelo saco una calabaza muy pequeña, pero de un color azul brillante como el de el vidrio con luz azul, se levanto la puso en mi mano y me miro.

Yo siempre estaré contigo jamás me dejes, y me veras como soy cada Halloween a las 12:00 de la noche ahora vete.

Abrí los ojos y me di cuenta que todo era un sueño, me levante de la cama y me asome por la ventana, en la otra acera estaba un gato negro moviendo su cola era calabaza, s       saque de mi bolsa un aniño de calabaza resplandeciente como la luna, y me di cuenta…

NO ERA UN SUEÑO.